Es curioso cómo se trata en el seno del
Ayuntamiento de Sant Cugat el tema del dinero que la Generalitat (unos cuantos
millones de Euros) debe a Sant Cugat, y que no paga.
La situación concreta es la siguiente:
–
La Generalitat debe dinero que no paga. Es el
mayor deudor del Ayuntamiento de Sant Cugat.
–
El equipo de gobierno del Ayuntamiento se queja,
pero “de aquella manera”.... con la boca pequeña (recordemos que ambos están
controlados por el mismo partido: CiU).
–
El primer partido de la oposición (el Partido
Popular) y algún otro, piden habitualmente al equipo de gobierno que haga lo
posible para reclamar a la Generalitat que pague sus deudas y que no estrangule
a Sant Cugat.
–
El equipo de gobierno responde que la Generalitat
no puede pagar por culpa del Estado (del déficit fiscal, se entiende).
En este estado de cosas, se puede afirmar, sin
equivocarse, lo siguiente:
–
Que el Ayuntamiento de Sant Cugat tiene
tensiones de tesorería (momentos de escasez de liquidez) a causa de los
derechos de crédito no cobrados a tiempo (los impagos de la Generalitat
principalmente).
–
Que la Generalitat no paga sus deudas a los
ayuntamientos en el plazo establecido, poniendo como excusa que es por culpa
del Estado.
–
Que el Estado ha habilitado un mecanismo de
ayuda a las Administraciones autonómicas para el pago de sus deudas, por el que
les facilita liquidez para que puedan pagarlas. Con ello alivia la tensión de
tesorería de la propia Generalitat, que se ha acogido a este mecanismo los dos
últimos años por importes que rondan los 5.000 millones de euros cada año.
–
Que la Generalitat sí tiene dinero (y mucho)
para gastar en subvenciones a entidades que promueven cuestiones identitarias
(que son en realidad partidos políticos encubiertos), en embajadas (que no
hacen en realidad ningún servicio porque ya lo hacen las embajadas españolas,
que son las únicas competentes), en organización de actos en contra de los que
ellos denominan “Estat Español” (porque se han auto impuesto no decir “España”),
en organismos públicos de comunicación como TV3 o Catalunya Radio (que no
respetan ni por casualidad el pluralismo existente en la sociedad catalana y
que promueven permanentemente el pensamiento único), en subvenciones o ayudas a
medios de comunicación privados como los grupos empresariales propietarios de
La Vanguardia, El Periódico de Catalunya, el diario Ara, etc (que nos dan día
tras día, portada tras portada, una visión de la realidad parcial, adaptada a
las directrices del poder político de CiU, y en última instancia de ERC), y un
largo etcétera de gastos que sí se pagan puntualmente.
Cuál es la conclusión de todo esto? Que aquí los
que les importa esta gente del gobierno de la Generalitat y a sus socios de ERC
es el objetivo nacionalista de crearse su reino de taifas, y lo demás les
importa un pimiento, incluidos los ciudadanos de Sant Cugat, que dejan de
recibir servicios (en calidad y en cantidad), puede que sin ser todavía muchos
de ellos conscientes de dicha realidad.
Alvaro Benejam Peretó
Concejal del Partido Popular
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