El pleno de ayer fue uno de los más duros que se recuerdan en Sant Cugat por el tono y la sucesión de mociones presentadas para desacreditar las políticas estatales del Gobierno del Partido Popular. Así, los diferentes partidos, tanto del Gobierno municipal (CiU) como de la izquierda (CUP, ICV y PSC) arremetieron, moción tras moción, contra la Ley de Seguridad Ciudadana, la Reforma de la Administración Local, la Reforma de la Justicia y el anteproyecto de reforma de la Ley del Aborto. Sobre esta última, el PP presentó una moción de apoyo al ministro Ruiz-Gallardón.
También hubo mociones para apoyar la celebración de una consulta separatista en Cataluña y para “revisar” los acuerdos con la Santa Sede de 1979, a las cuales el PP también se opuso. En el caso de la consulta, Jorge Carrerasdefendió una vez más la necesidad de actuar dentro de la legalidad y repitió al resto de partidos del pleno que estaban a favor de la consulta (PSC incluido) que el derecho a decidir es un derecho que “no existe”. Carreras tuvo que recordar que el derecho a decidir se ejerce en las elecciones democráticas que ya existen en un Estado de Derecho como España y rechazó que los separatistas invoquen a un infundamentado derecho de autodeterminación. La alcaldesa, Mercè Conesa, de CiU, intervino para replicar al PP y advertir que la “fuerza del independentismo” es “imparable” y “tozuda”
A pesar de la dureza de algunas declaraciones de otros partidos, los cuatro concejales del PP repelieron una tras otra las posturas contrarias a estas leyes.
Sobre la Ley de Seguridad Ciudadana, a quién se opuso todo el consistorio menos el PP, Bruno de Salvador recordó la importancia de preservar el orden público y evitar escenas como la que sucedió en el Parlament hace dos años, donde el president tuvo que abandonar el hemiciclo en helicóptero. Además, recordó al ponente de la CUP que existen diferentes maneras de resolver las cosas, pero le recordó que el PP tiene la legitimidad de los votos y por tanto, democrática, mientras que la calle no.
Por su parte, el presidente Jorge Carreras, defendió las reformas judiciales y de la Administración local recordando que persiguen el fin de hacer más eficaces el trabajo de los tribunales y los municipios. Recordó además, en el segundo caso, que lo que persigue la reforma local es el ahorro de ingentes cantidades de presupuesto y distribuir las competencias con el fin de evitar duplicidades.
El punto álgido del pleno fue con la presentación de la moción del PP para defender el anteproyecto de reforma de Ley del Aborto. Una veintena de miembros de las juventudes de extrema izquierda separatista Arran irrumpieron en el pleno para gritar consignas a favor del aborto libre y gratuito exhibiendo una pancarta en la que tildaron la Ley Gallardón de “fascista”.
Tras el breve incidente, Carreras continuó su exposición en defensa de la vida del no nacido poniendo el acento en el hecho de que el embrión o feto es un verdadero ser humano y recordando que lo que el anteproyecto de ley pretende es reforzar la protección del concebido no nacido, ante la absoluta desprotección que suponía la Ley Aído. La moción fue finalmente rechazada con la abstención de los democristianos de Unió Democràtica y la oposición de la izquierda y de Convergència, a excepción de dos concejales que se abstuvieron. La alcaldesa votó en contra de restringir el aborto. Hasta ahora siempre se había abstenido.
Después de tres horas, se dio paso a los problemas municipales. Entre las diferentes votaciones, el PP se opuso a la resolución de Alegaciones por parte del Equipo de Gobierno sobre el plan de mobilidad de Sant Cugat para el cual se prevé un coste de 30 millones de euros y que pretende peatonizar Quatre Cantons. El concejal de Salvador lamentó que el PP fuera la única de las 18 entidades que había visto desestimadas la totalidad de sus alegaciones (33 en total) indicando que dicha desestimación se debía a estrictos motivos políticos y no técnicos.
En el turno de preguntas, los concejales del PP Sant Cugat pidieron cuentas al Gobierno municipal por las “okupaciones” en Mira-Sol, la no recogida de basura en las calles céntricas de la ciudad y por una partida extraordinaria al periódico digital municipal, aparte de los 900.000 euros de asignación que recibe anualmente del presupuesto público.
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